3.2. Evolución demográfica de El Puig:
El crecimiento demográfico de El Puig ha sido
continuo entre 1960 y 1999, periodo de tiempo en el que ha doblado su
población, pasando de 3.556 a 7.315 habitantes. Si observamos la curva de las
tasas de crecimiento global respecto a 1960 (fig. 2) vemos como el incremento ha sido muy
regular, con un ligero bache entre 1975 y 1991. Esta constancia es mucho más
evidente si comparamos su curva con las de sus municipios vecinos, L'Horta Nord
y Valencia capital. A tenor de esta regularidad sería difícil establecer
diferencias en el tiempo para la evolución de El Puig, pero es el contraste con
las demás entidades lo que nos aproxima a una diferenciación en dos
sub-periodos: 1960-1981 y 1981-1996. (Anexo: Tablas y Gráficos: hoja 1A)
En el primero de ellos todos mantienen
una pendiente de la curva ascendente y más o menos constante, aunque es El Puig
el que la muestra más tendida lo cual indica un menor crecimiento global que
los demás. Sin embargo en el segundo sub-periodo, mientras que casi todos
–excepto Pobla de Farnals- ralentizan su crecimiento, El Puig mantiene su
tendencia alcista constante. Estas diferencias en el ritmo de crecimiento
pueden observarse mejor en las curvas de variaciones intercensales.
(Anexo:
Tablas y Gráficos: hoja 1A)
Entre 1960 y 1981 el crecimiento absoluto
de la población de todas las entidades contempladas está constituido por el
crecimiento vegetativo derivado de unas tasas de natalidad altas y, sobre todo,
por un saldo migratorio positivo muy importante, por la llegada de contingentes
procedentes del éxodo rural que fue más intensa entre 1960 y 1975, pero que en
L'Horta Nord, debido a una industrialización más tardía y duradera, se prolongó
hasta 1981. La explicación de por qué El Puig fue siempre por debajo del resto
en esta primera etapa, puede estar en la existencia de una vía de comunicación
directa con la ciudad de Valencia, la N-340, de la que El Puig se encuentra
algo desplazado, en un momento en que el uso del coche particular aún no está
muy generalizado.
Entre 1981 y 1996, además de los cambios
cuantitativos en el crecimiento demográfico, también hay un cambio cualitativo
en su composición; por un lado el crecimiento vegetativo es insignificante por
el rápido descenso de las tasas de natalidad y el éxodo rural es ya un proceso
prácticamente inoperante que ha dejado su protagonismo al éxodo urbano. La
década de los 80 y principios de los 90 es un periodo en el que la ciudad de
Valencia estuvo inmersa en una serie de grandes proyectos urbanísticos
–construcción de túneles para evitar intersecciones en grandes vías,
remodelación de espacios públicos abiertos y peatonalización de calles,
construcción del metro... - que provocaron situaciones caóticas y duraderas en
cuanto a la movilidad, incrementaron los niveles de contaminación atmosférica y
acústica por la saturación del tráfico rodado y las obras, etc. Desde 1981 se
han producido un conjunto de hechos que han contribuido a aumentar el atractivo
de El Puig como lugar de residencia y de trabajo, así la generalización del
transporte privado junto a la construcción de ciertas infraestructuras viarias
-by-pass- y la mejora de los
servicios de transporte colectivo, han acortado las distancias (tiempo) con Valencia
y otras poblaciones. A esto se une un cambio de mentalidad motivado por la toma
de conciencia de los problemas urbanos y un incremento de las rentas
disponibles por la bonanza económica, que se plasma en la búsqueda por parte de
un segmento de la población urbana de un marco de vida más apacible y natural,
condiciones que El Puig reúne además de otros atractivos paisajísticos,
históricos y culturales.